martes, 12 de mayo de 2009

Pop de luto


Un cáncer de pulmón ha apagado hoy, definitivamente, la voz de Antonio Vega. Una de las voces más características del pop español, de la música de la movida, de las canciones plagadas de sentimientos que miles de jóvenes han coreado desde los ochenta hasta ahora.

Alto, desgarbado y excesivamente delgado, con esa huella que deja en el rostro y en la mirada una vida sembrada de drogas, Antonio Vega es el artífice de "La chica de ayer", esa canción que todos nos sabemos y que hace poco fue elegida la más representativa de la movida madrileña. Pero no sólo eso, también escribió otras grandes composiciones como "Lucha de gigantes", "El sitio de mi recreo" o "Una décima de segundo".

Antes de eso, antes de formar Nacha Pop en 1978, estuvo matriculado dos años en la Escuela de Arquitectura, otros dos en Sociología y en la Escuela de Pilotos. Vamos, que no era, como dirían muchos en la época (y ahora incluso) un yonki vago y maleante. Lo primero seguramente, pero de lo demás permítanme dudar.

Vi a Antonio Vega en directo por primera vez hace ya siete años, en la Plaza Mayor, y ya entonces me pareció un joven muy viejo. No he querido poner aquí fotos de sus últimas actuaciones porque la verdad parecía un fantasma,casi un cadáver viviente. Lo sorprendente es que haya mantenido la energía con ese aspecto, y después de perder a su chica, Marga, tanto que estaba preparando un nuevo disco.

Qué pena que ya no saldrá a la luz, qué pena que ya no vayamos a volver a escuchar en directo sus canciones, su voz quebrada...
Qué pena que ahora sea él un chico de ayer...

Al enterarme esta mañana de la noticia lo primero que me ha venido a la cabeza es la muerte de Enrique Urquijo, cantante de Los Secretos, solo y demasiado drogado, en un portal de Malasaña.

Ya ven, un día cualquiera, sin saber qué hora es, se despierta uno sin saber porqué en medio de nieve, huracanes y abismos. Cuando mueren las voces que forman las bandas sonoras de nuestra vida es, en parte, como si muriera algo de nosotros mismos.

Me gusta imaginarme que ahora Antonio Vega está en el Penta (en el Penta de los ochenta, no el de hoy), con Enrique Urquijo, con Antonio Flores y muchos más que se quedaron por el camino, fumando, porque ya no le puede hacer más daño, y cantando guitarra en mano. Me da igual que canten "Pongamos que hablo de Madrid", "Te he echado de menos hoy" o "Lucha de gigantes". Todas son parte de la banda sonora de mi vida.

1 comentario:

MaríaT dijo...

Amén, Ale, no puedo añadir nada más.
Besos y música